Su pasado romano, anglosajón y vikingo ha labrado en York un carácter singular. Esta es una de las ciudades más bonitas de Inglaterra y del Reino Unido, y conserva intacto gran parte de su patrimonio arquitectónico y cultural.
La faceta contemporánea de York es absolutamente dinámica, a tal punto que se la considera una de las capitales de las compras del Reino Unido. El recinto amurallado alberga infinidad de tiendas de souvenirs y posibilidades gastronómicas.
La Eboracum romana, Eoforwic anglosajona y Jorvik vikinga ofrece mucho para ver y hacer a sus visitantes. Desde escenarios de película hasta una larga tradición en la elaboración de chocolate, que se puede conocer en el Museo del Chocolate, York es un destino de ensueño.
Muchos de los sectores de la muralla de York son romanos, y datan del año 71 d. C. Es posible recorrerlas y luego bajar a explorar la vibrante mezcla de iglesias, pubs, mercados y museos del interior del recinto.
Esta extraordinaria iglesia de estilo gótico es la segunda más grande del norte de Europa, después de la de Colonia. Fue construida entre los siglos XII y XV. Su interior combina piedra, madera y hermosas vidrieras, además de una torre desde cuya cima se contemplan unas vistas maravillosas. La entrada a la catedral cuesta £ 10, y quien desee subir a la torre debe pagar £ 5 más.
En los actuales jardines del Museo de Yorkshire se aprecian las ruinas de una abadía benedictina. El edificio original había sido inaugurado en el año 1055, y estaba dedicada a St. Olave. Las ruinas que hoy se pueden admirar pertenecen a la restauración realizada entre 1271 y 1294.
Recorrer este museo es sinónimo de viajar por más de 400 años de historia británica. Alberga desde atractivas recreaciones históricas, como una calle victoriana, hasta los escalofriantes calabozos del Castillo de York. También hay zonas más divertidas, como la que representa la década de 1970.
La cerveza artesanal es un emblema de York, sus tradiciones y su cultura gastronómica. Su peculiar sabor se atribuye a la calidad del agua del río y a la habilidad de los cerveceros locales.
En el Centro Vikingo Jorvik es posible indagar en la vida y las costumbres de los vikingos asentados en York a finales del siglo I d. C. Ofrece una fascinante experiencia interactiva. La entrada cuesta £ 11.
Esta torre es una de las pocas estructuras que quedan en pie del castillo de York. Ha cumplido los más diversos fines. Al subir se contemplan unas magníficas vistas de la ciudad. El precio de la entrada es de £ 5.
El espectáculo teatral The York Dungeon es un viaje por las historias tenebrosas de York. Hay que prepararse para ver personajes escalofriantes, escenarios virtuales inmersivos y emocionantes efectos especiales, que dan lugar a una experiencia única y emocionante.
Se dice que en la calle The Shambles se han inspirado los productores de Harry Potter para diseñar el callejón Diagon. En un extremo de la calle se encuentra La Tienda Que No Puede Ser Nombrada o The Shop That Must Not Be Named, donde siempre hay cola para entrar.
Abordar un crucero para navegar por el río Ouse ofrece una experiencia tan interesante como plácida. El barco cuenta con cubiertas panorámicas, así que permite contemplar los monumentos de la ciudad durante el viaje. El precio del billete general es de £ 10,40, y hay descuentos para niños, estudiantes y familias.
En el Centro Vikingo Jorvik es posible indagar en la vida y las costumbres de los vikingos asentados en York a finales del siglo I d. C. Ofrece una fascinante experiencia interactiva. La entrada cuesta £ 11.
Esta torre es una de las pocas estructuras que quedan en pie del castillo de York. Ha cumplido los más diversos fines. Al subir se contemplan unas magníficas vistas de la ciudad. El precio de la entrada es de £ 5.
El espectáculo teatral The York Dungeon es un viaje por las historias tenebrosas de York. Hay que prepararse para ver personajes escalofriantes, escenarios virtuales inmersivos y emocionantes efectos especiales, que dan lugar a una experiencia única y emocionante.
Se dice que en la calle The Shambles se han inspirado los productores de Harry Potter para diseñar el callejón Diagon. En un extremo de la calle se encuentra La Tienda Que No Puede Ser Nombrada o The Shop That Must Not Be Named, donde siempre hay cola para entrar.
Abordar un crucero para navegar por el río Ouse ofrece una experiencia tan interesante como plácida. El barco cuenta con cubiertas panorámicas, así que permite contemplar los monumentos de la ciudad durante el viaje. El precio del billete general es de £ 10,40, y hay descuentos para niños, estudiantes y familias.
York es la capital culinaria de Yorkshire. Entre sus brasseries de alta gama se cuentan Star Inn the City, que ofrece un "Market Menu" de dos platos por £ 17 o de tres platos por £ 22; y Melton's. Las comidas estilo pub se pueden disfrutar en lugares como Maltings y Guy Fawkes Inn, y por platos vegetarianos se puede ir a El Piano.
Si deseas tomar el té de la tarde, acércate a Bettys Cafe Tea Rooms, una institución de York. Las comidas en los restaurantes de alta calidad cuestan unas £ 40 por persona.
El mejor período para viajar a York se da entre finales de primavera y comienzos de otoño. Asimismo, en abril, mayo, septiembre y octubre el tiempo es agradable y, aunque puede haber días fríos, las calles están más despejadas de turistas.
Ten presente que a finales de octubre la ciudad se ilumina, literalmente, por la celebración de las fiestas nacionales y el Festival de Fantasmas, y que a mediados de febrero tiene lugar el Festival Vikingo.
Para llegar a York conviene volar al aeropuerto de Leeds Bradford (LBA) y, desde allí, se puede llegar a Leeds en 30 minutos tomando el autobús 757, cuyo billete cuesta £ 3,80, para luego tomar el tren a York. Las tarifas varían, pero los tickets fuera de temporada cuestan unas £ 13, y el viaje dura 25 minutos. También se puede tomar un taxi, cuya tarifa ronda las £ 50, o moverse en coche de alquiler cómodamente.
Desde los aeropuertos de Londres es posible tomar el tren desde King's Cross St. Pancras hasta la estación ferroviaria de York. El viaje del servicio expreso dura unas dos horas, y entre los operadores figuran Virgin Trains y Grand Central.
Para llegar a York desde el aeropuerto Leeds Bradford hay que tomar la A658 y enlazar con la A59. Desde Londres se llega por la A1 (M), mientras que desde Mánchester se debe acceder a la M62, luego coger la A1 (M) hacia el norte y abandonarla en la salida 44, para dirigirse a York por la A64.
York cuenta con buenos servicios de autobuses interurbanos a precios razonables. National Express y Megabus ofrecen servicios diarios desde Londres, Leeds y Mánchester y muchas otras ciudades británicas. Un viaje en bus Londres York te costará entre £ 6 y 26.
1. The Shambles. Alojarse en las inmediaciones de The Shambles ofrece una experiencia especial, ya que la zona alberga fascinantes tiendas en edificaciones con entramado de madera. Asimismo, está repleta de restaurantes, pubs y boutiques de lujo.
2. Museum Gardens. Este distrito se encuentra al norte del centro amurallado de la ciudad. Además de hermosos jardines, en esta zona se ubica el Museo de Yorkshire, la Galería de Arte de York y las ruinas de la abadía de Santa María.
3. Micklegate. Está ubicado cerca de The Shambles, junto a la estación de tren. Aquí se ubica York Brewery.
Los autobuses son una buena opción para visitar los principales lugares de interés de York, y los billetes cuestan alrededor de £ 2. Es recomendable adquirir pases diarios, ya que su precio es £ 4,50 y valen para todas las líneas de autobuses de la ciudad.
La bajada de bandera diurna cuesta en York £ 2,70, y luego el precio aumente en £ 0,12 por cada kilómetro recorrido. Las tasas suben por la noche y durante las carreras de caballos.
York es un lugar fantástico para moverse en coche, así que es una buena decisión reservar un vehículo en el mismo momento en el que se reserva el vuelo y el hotel. Europcar, Enterprise y Thrifty prestan servicios en la ciudad. La tarifa diaria por un turismo compacto, por ejemplo, es de unas £ 40.
York es un destino de compras de primer nivel, y entre las mejores zonas comerciales se incluye el centro amurallado de la ciudad. También es un buen lugar Coney Street, donde se encuentran tiendas como Pylones y Leia Lingerie. Stonegate, por su parte, alberga tiendas de lujo.
En York hay sucursales de Londis, Sainsbury's y Boots, entre otras cadenas de supermercados. Los precios son razonables. El litro de leche cuesta £ 1 y una docena de huevos unas £ 1,85.